Con el correr del calendario acercándose al 14 y 15 de mayo del 2011, la población paraguaya, embebida con un licor de nacionalismo, amor propio o como se llame, se volcó de lleno a participar en las actividades de conmemoración del Bicentenario del nacimiento de la República del Paraguay.
Asunción, como la Capital, fue uno de los focos principales de congregación de actos y de las mayores multitudes de personas, que, temporalmente, colmó el microcentro asunceno participando de cuanta actividad programada hubo, o simplemente, tal vez llamados a ese punto casi ya no tan tácito, se presentó a vivir esa emoción contagiante de celebrar el ser paraguayo.
Ese punto emblemático es el "Oratorio de la Santísima Virgen Nuestra Señora Santa María de la Asunción" y "Panteón Nacional de los Héroes".
Testigo de innúmeras aglutinaciones multitudinarias, en esta ocasión se vistió con sus mejores galas, para ponerse a tono con las fechas patrias paraguayas.
Otros edificios emblemáticos como el Viejo Cabildo de Asuncíón y la Catedral también se arroparon de ocasión, acto no ignorado por quienes pudieron apreciar las galas presentadas.
Desde Rutas Paraguayas anhelamos que parte de la enorme energía desplegada en conjunto por todos, se transforme en fuerza transformadora para un Paraguay mejor, donde la convivencia en armonía, solidaridad y respeto a la vida sea la meta principal de quienes abogamos por una patria con un futuro mejor.
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